Los ruidos en la cabeza.
Publicación editada 17/05/2025
No son pocos los pacientes que acuden a la consulta aquejando que tienen ruidos en la cabeza. A veces, no siempre, identifican que son en los dos oídos, otras insisten que son en toda la cabeza.
Estos ruidos que se producen en ausencia de una fuente de sonido externa, se conocen como acúfenos. No son una enfermedad en sí Y es un síntoma que puede deberse a diversas causas. Algunas de las más comunes pueden ser:
1.- Causas relacionadas con el oído:
- Pérdida auditiva: Aunque a veces no seamos conscientes de una pérdida auditiva leve, especialmente si la pérdida solo afecta a ciertas frecuencias, es una de las causas más frecuentes de acúfenos.
- Exposición a ruidos fuertes: Un ruido repentino e intenso (como una explosión) o la exposición prolongada a ruidos elevados (en entornos laborales ruidosos, conciertos, etc.) pueden dañar las células ciliadas del oído interno, y producir acúfenos.
- Obstrucción del conducto auditivo: La acumulación de cerumen, infecciones de oído o la presencia de algún objeto extraño pueden bloquear el conducto auditivo y producir acúfenos.
- La otosclerosis: Esta enfermedad del oído, que causa un crecimiento anormal de hueso, puede afectar la audición y provocar acúfenos.
- Enfermedad de Meniere: Un trastorno del oído interno que puede causar vértigo, pérdida de audición y acúfenos.
- Disfunción de la trompa de Eustaquio: Problemas con el tubo que conecta el oído medio con la parte posterior de la nariz y la garganta pueden causar cambios en la presión del oído y generar acúfenos.
2.- Otras causas médicas:
- Lesiones en la cabeza o el cuello: Traumatismos pueden afectar las estructuras auditivas, a nivel de los nervios o las áreas cerebrales relacionadas con la audición.
- Problemas vasculares: La hipertensión arterial, la aterosclerosis o malformaciones en los vasos sanguíneos cercanos al oído pueden alterar el flujo sanguíneo y causar acúfenos pulsátiles (que siguen el ritmo del latido del corazón).
- Trastornos de la articulación temporomandibular (ATM): Problemas en la mandíbula y los músculos de la zona pueden producir acúfenos.
- Tumores: En casos raros, un tumor en el nervio acústico (neurinoma del acústico) u otras áreas de la cabeza y el cuello puede causar acúfenos.
- Problemas de tiroides: Desequilibrios en la función tiroidea pueden estar asociados con acúfenos.
- Anemia: La deficiencia de hierro puede, en algunos casos, manifestarse con ruidos en la cabeza.
- Migraña: Algunas personas experimentan acúfenos durante o después de un episodio de migraña.
3.- Factores relacionados con el estilo de vida y otros:
- Estrés y ansiedad: Los periodos de estrés pueden desencadenar o intensificar la percepción de los acúfenos.
- Medicamentos: Algunos fármacos (aspirina, antiinflamatorios no esteroideos, ciertos antibióticos, antidepresivos, etc.) pueden tener como efecto secundario los acúfenos.
- Bruxismo: Rechinar los dientes, especialmente durante la noche, puede tensar los músculos de la mandíbula y el cuello, lo que a veces se relaciona con ruidos en la cabeza.
Es importante acudir a un otorrinolaringólogo para que pueda evaluar su situación específica. El médico realizará una historia clínica, explorará los oídos y puede solicitar pruebas audiológicas para determinar si existe alguna pérdida auditiva u otro problema. En algunos casos, pueden ser necesarias pruebas adicionales para descartar otras causas médicas.
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