El acúfeno en el oído sordo.
Publicación editada 24/08/2024Uno de los peores acúfenos, de los que el paciente tiene una vivencia más negativa, y que empeora considerablemente la calidad de vida del paciente, es el acúfeno que se produce en un oído que tiene una pérdida auditiva severa, profunda, o una cofosis, es decir, una pérdida auditiva total.
En otras ocasiones hemos comentado que uno de los tratamientos más efectivos en el control del acúfeno es el uso de audífonos enmascaradores, junto a las terapias de habituación. Pero el audífono enmascarador poco o nada puede hacer en un oído que no oye el ruido enmascarador que produce el audífono debido a la grave pérdida auditiva. Tampoco funciona cuando la enfermedad del oído interno produce tal distorsión del sonido del enmascarador que molesta más que beneficia. Es el caso de algunas sorderas súbitas.
En estos casos el tratamiento que ha demostrado ser la solución más efectiva es el implante coclear.
El implante en un oído sordo, además de devolver la audición a dicho oído y, poder enmascarar el acúfeno, en ocasiones consigue que el acúfeno cambie y disminuya, incluso cuando el paciente no tiene el implante conectado.
Todavía no tenemos todas las respuestas de las razones exactas para que esto suceda, pero si estamos en disposición de ofrecer un tratamiento para esos acúfenos graves que padecen los pacientes en su oído sordo.
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